¿Qué dicen tus obras de ti?

 

“Se levantan sus hijos y la llaman bienaventurada; Y su marido también la alaba: Muchas mujeres hicieron el bien; Mas tú sobrepasas a todas”.

Proverbios 31:28-29

   SE LEVANTAN: Ellos tienen una actitud para ella.

BIENAVENTURADA: “prospera” o “feliz” y que ella experimenta la bendición de Dios y es Él quien le otorga esa bendición.

Las familias en los tiempos del Antiguo testamento tenían un sistema en que el padre tenía la mayor autoridad ante su familia, la madre hebrea antigua se dedicaba a las labores hogareñas con todo lo que ella implica, los niños hebreos por lo general tenían un gran respeto a sus padres, aun cuando llegaban a ser adultos. Es decir, las labores de cada integrante en esos tiempos eran marcadas y el general de las familias se conducía de esa forma.

No pasa desapercibido que en Proverbios 31:28-29 la mujer virtuosa recibe halagos de sus hijos y de su esposo, sus hijos se levantan. La traducción en la lengua actual dice “Sus hijos la felicitan; su esposo la alaba y le dice: «Mujeres buenas hay muchas, pero tú las superas a todas»”. Los hijos la elogian por como es ella, la felicitan por ser una mujer virtuosa y la llaman bienaventurada.

Con seguridad el hogar de la mujer virtuosa no era un hogar donde no existían problemas, dificultades y pruebas, pero esta mujer como nos dice en el verso 25 “Fuerza y honor son su vestidura; Y se ríe de lo por venir”, es decir ella era una mujer que no dependía de las circunstancias, si no que su total confianza estaba en el Señor y reflejaba tranquilidad, dominio propio ante su familia, sus hijos veían en su madre una mujer con paz en medio de la adversidad. 

No solo sus hijos tienen palabras de elogio a ella, sino también su marido, recordemos que el corazón de su marido está confiado en ella y que ella le da bien todos los días de su vida. Se dijo inicialmente en este capítulo que todas las mujeres del hogar tenían sus laborares bien definidas, pero la mujer virtuosa es especial, es por eso que su marido le dice «Mujeres buenas hay muchas, pero tú las superas a todas». Reconocía que era una mujer de valor por el temor que ella tiene de Dios, nos da a entender que mujeres trabajadoras, buenas madres, buenas esposas hay muchas, pero la mujer virtuosa era única, Dios en su vida la hacía diferente de las demás. La biblia dice que encontrarla es como encontrar una joya muy valiosa, de un valor sin igual.