Introducción: Aprendiendo de la creación de Dios

“Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera. Y fue la tarde y la mañana el día sexto.”

Génesis 1:31

En Génesis 1 se muestra que Dios creó el universo, la tierra, el sol, la luna y las estrellas, las plantas y los animales, y a las dos primeras personas en el sexto día. Es maravillosa la creación que nuestro Dios hizo.

El quinto día creo (Gn.1:20-23)

1. Hizo los seres vivientes de las aguas,
2. Monstruos marinos y
3. Las aves

El sexto día: (Gn.1:25)

1. Hizo las bestias,
2. animales que se arrastran sobre la tierra (podrían ser los insectos, los anfibios, arácnidos, reptiles, etc.)
3. También al hombre. En este tiempo, aprenderemos como imitar o no, las cualidades de estos animales. Es innegable que hay un diseño inteligente detrás de la creación del que debemos aprender y considerar.

Al Creador le plació que el hombre se señoree y tenga autoridad sobre ella y que además disfrute de todo lo que él hizo.

Ahora, con la caída del hombre, el Señor lo maldijo y con él a toda su creación. Lo que incluyó a: los animales, las aves, los peces, los insectos, etc.

Sin embargo, podemos ver que, a pesar de esta bajo maldición, la escritura nos alienta a que aprendamos de ellos. En:

1. Proverbios 6 dice: Ve, mira, observa
2. Mateo 6 dice: aprended y considerad

Job capítulo 12:7 y 8 dice:

“Pregunta ahora a las bestias, y ellas te enseñarán; a las aves de los cielos, y ellas te lo mostrarán; o habla a la tierra, y ella te enseñará; los peces del mar te lo declararán también. ¿Qué cosa de todas estas no entiende que la mano de Jehová la hizo?

Nuevamente el Señor nos llama a poner atención, a que no pasemos por alto las cosas que él hizo y nos dice: miren, pregúntenle a las bestias y ellas te enseñarán, vean cómo se comportan; pongan atención a las aves de los cielos y ellas te mostrarán.

Es porque el Señor con su palabra, formó a cada uno de ellos y los dotó con atributos y características, que les permiten vivir en esta tierra. Y aunque están bajo maldición, todavía podemos ver el maravilloso diseño del creador. El sello de su hacedor.

Ahora, a nosotros nos tomó del polvo y fuimos formados con su mano, tenemos la capacidad para pensar, razonar y observar. Por tanto, nos llama a que aprendamos de ese diseño. Es maravillosa la creación, aunque ellos no pueden hacerlo como nosotros, si tienen características de las que debemos aprender; características que aún se mantiene desde el principio, que el creador puso en su diseño.

1. Ellos muestran la gloria de quien los hizo con su palabra.
2. Muestran su grandeza, la majestad de su obra.
3. Su poder, cuán grande es tu nombre en toda la tierra.
4. Su amor, hizo a cada uno con un diseño especial. Desde el más microscópico hasta el más grande.
5. Su perfección, en cada detalle: colores, pieles, ojos, etc.
6. Su sabiduría, en cómo viven, como se reproducen, su nacimiento, su transformación, de la forma en que crecen, como se alimentan, etc., cada uno para el propósito que Dios puso en ellos.

¡Dios de maravillas, es nuestro Dios! Que da vida en medios tan inhóspitos como el ácido. ¡Majestuoso Señor! ¡Alabamos su gloria y hermosura!

Dios creó a los animales con tanta variedad y es por eso que aprenderemos de ellos; a imitarlos en lo bueno y considerando lo negativo para no imitarlo. Animales que se mueven en tiempos programados, generación tras generación. ¡Maravilloso! Su gloria misma.

Salmos 111:2 y 3:

“Grandes son las obras de Jehová, buscadas de todos los que las quieren. Gloria y hermosura es su obra, y su justicia permanece para siempre.”

Salmos 19:1 dice:

“Los cielos cuentan la gloria de Dios, y el firmamento anuncia la obra de sus manos”

¡Majestuoso es nuestro Dios!